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Arquitectos: Hooba Design Group; Hooba Design Group
- Área: 5500 m²
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Fotografías:Parham Taghioff, Pooyeh Nouryan, Babak Toosipour, Abbas Havashemi, Deed Studio
Descripción enviada por el equipo del proyecto. En el corazón de una de las zonas más concurridas de Karaj, el Complejo Comercial Valiahdi se encuentra en un bulevar vehicular-peatonal. Teniendo en cuenta la gran cantidad de peatones en la zona, que era importante, para el equipo de diseño, generar una fachada multidimensional que respetara al observador desde varios ángulos y creara una conexión íntima entre el edificio y la ciudad.
Inspirada por la red de calles existentes y el contexto urbano, fue creada una cuadrícula geométrica que más tarde fue modificada para optimizar los ángulos de visión. Esta geometría se transforma gradualmente de volúmenes negativos a positivos en la parte superior e inferior, generando dos grandes vacíos en estas secciones. Estos huecos forman el acceso principal y los balcones en los dos pisos superiores. La nueva geometría se desarrolló aún más para crear un módulo repetitivo que define tanto la fachada exterior, como los espacios interiores. Estos módulos también actúan como diafragmas, controlando la exposición a la luz solar sur.
La multidimensionalidad en la fachada también crea una conexión visual dinámica entre el edificio, la ciudad, y el observador, de modo que la percepción del observador varía mientras se mueve hacia o en contra del edificio. Esta percepción también se ve afectada por las variaciones de la luz solar, lo que resulta en un patrón dinámico de luz y sombra en la fachada durante el día.
Inspirado en Orosi de la arquitectura persa tradicional, se utilizó cristal con patrones para desarrollar aún más la idea de la presencia dinámica de la luz y la sombra, y para mejorar la calidad de la atmósfera interior. Además, esta técnica ayudó a controlar el calor generado por la exposición excesiva al sol en el lado sur por la captura de la mayor parte del calor generado. Se utilizaron vitrales en el lado interior de las dos capas de acristalamiento haciendo que el sistema sea altamente duradero contra las influencias externas.
Los dos colores emblemáticos de la arquitectura tradicional persa son de ladrillo y el turquesa. El antiguo bazar en Kashan es un gran ejemplo de donde hay un cambio gradual de ladrillo en las partes más bajas ( que representa la tierra) a un color turquesa en la cúpula (que representa el cielo). En este proyecto el cambio entre los dos colores se estableció basado en las fluctuaciones de la fachada. Hay una mayor concentración de color ladrillo en las secciones cóncavas, mientras que en las secciones convexas hay una mayor concentración de color turquesa .
En algunas partes de las superficies interiores, se utilizaron vidrios transparentes y semitransparentes en paralelo a la fachada acristalada. Esto permite que la mayoría de los espacios intermedios reciban luz natural durante el día.